En esta fase inicial, Enveedo aporta valor al permitir la identificación de activos críticos -a menudo denominados joyas de la corona- junto con una clara identificación y priorización de los riesgos. También facilita la gobernanza en todas las áreas relacionadas con la seguridad, la privacidad y la IA.

En esta fase se abordan los principales puntos débiles, como el aislamiento de datos y herramientas, la falta de claridad en las prioridades de riesgo y la visibilidad limitada de la situación general de seguridad de la organización.

A medida que las organizaciones pasan a la planificación, Enveedo apoya el desarrollo de hojas de ruta alineadas con el negocio, la gestión de riesgos de proveedores y la optimización de recursos.

Esta fase aborda retos como la falta de una dirección estratégica, la falta de prioridad de los riesgos de terceros y la desconexión entre los esfuerzos de seguridad y los objetivos empresariales más amplios.

Durante la fase de ejecución inicial, Enveedo aporta valor a través de flujos de trabajo automatizados, procesos de cumplimiento integrados y gestión de tareas racionalizada.

Estas capacidades abordan directamente la carga de los flujos de trabajo manuales, los requisitos de cumplimiento y los recursos internos limitados.

En la fase de evolución continua, Enveedo permite la supervisión permanente, la elaboración de informes de rendimiento y la gestión adaptable de riesgos y proveedores.

Esto ayuda a las organizaciones a ir más allá de las posturas de seguridad estáticas, mejorar la capacidad de respuesta a las amenazas emergentes y obtener una mejor visibilidad del rendimiento de los proveedores.